El edificio que ha dividido Nueva York y ha propulsado un debate nacional sobre lo que significa ser estadounidense en un país fracturado por los atentados del 11 de septiembre ya tiene cara.
Una fachada y unos espacios interiores ciertamente espectaculares, que de llevarse a cabo la mezquita, se convertirían en un inesperado foco de atracción para los millones de visitantes se acerquen en el futuro a la remodelada Zona Cero. De estilo futurista, con una arquitectura alejada de las...
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